El alcalde de la provincia de San Pablo, Alfonso Romero Moza, se consolidó el 2023 como uno de los peores alcaldes de la región Cajamarca, pues su gestión no pudo ejecutar los recursos económicos que le asignó el Estado para obras y proyectos, logrando gastar solo el 64.1% y ubicándose en el séptimo lugar entre las 13 provincias del departamento.
Dichas cifras ponen en evidencia la mediocridad de la autoridad edil de los Sampablinos pues tuvo dinero, pero no supo gastarlos. De cerca de 4 millones y medio de soles, dados por el Gobierno Central, solo gastó 1 millón ochocientos mil soles, devolviendo el resto al erario nacional.
Los recursos que no pudo gastarlos se revirtieron indefectiblemente al Gobierno Central el pasado 31 de diciembre, y tendrá que esperar -con suerte- al mes de marzo o abril para que dichos recursos retornen a las arcas municipales para garantizar la continuidad de inversiones, de lo contrario se habrán perdido dichos presupuestos y quedarán algunas obras inconclusas.
Al parecer, solo sus fieles proveedores fueron los que sacaron provecho saliendo más gananciosos en el 2023, porqué hasta la fecha no se conoce ningún proyecto de envergadura.
