El Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) ha estimado que la presión tributaria (relación entre ingresos por impuestos y PBI) del Perú caerá de 16,8% en 2022 a menos de 15% en 2023, debido a no solo a la recesión en curso, sino a múltiples proyectos de ley impulsados desde el Congreso, que han eclipsado las cuentas fiscales del país.

Miryam Yepes, directora de Inteligencia Económica y Optimización Tributaria del MEF, advirtió que, si bien existe una falta de progresividad de rentas en la mayoría de economías del mundo, incluida la UE, en Perú es “particularmente grave”.

Durante la presentación del informe ‘Sistematización de las propuestas de reforma tributaria en el Perú, Chile y Colombia (2021-2023)’, organizada por el Grupo de Justicia Fiscal (GJF), la funcionaria consideró que esta disparidad ha sido sustentada, en parte, por el sabotaje a diversos intentos de reforma promovidos en los últimos años, como en particulares oportunidades sobre la minería.

“Tenemos una presión tributaria baja y un gasto tributario alto. Probablemente, como porcentaje de PBI, no es mucho (2%), pero considerando que nuestra presión al 2022 fue de 16,8%, es un gasto tributario relativo muy alto”, reveló.

En este punto, Yepes recordó que, en 2021, el FMI concluyó que Perú tenía una carga tributaria sobre la minería de nivel media (36%) y que “había espacio fiscal para incrementarla sin perder competitividad”, frente a otros países de la región, como Chile. Actualmente, esa distancia se ha alargado a 8 o 9 puntos.

Ante la negativa de los congresos desde entonces, el MEF ha optado por trabajar hoy por hoy en un programa de la OCDE que permitirá reordenar el sistema y recaudar “miles de millones de soles adicionales” a partir de la lucha contra la evasión-elusión.

“Cuando se impulsó esta reforma tributaria en 2021, se esperaba recaudar alrededor de S/12.000 millones. En lo que va del 2023, el Congreso ha promulgado proyectos de ley que tienen un costo fiscal que reducirá la recaudación entre S/8.657 y S/11.392 millones. Es decir, lo que se esperaba recaudar con la reforma, ya lo agotaron este año y el próximo se ve bastante negro”, suscribió.